Ecce Homo

El corazón se estremece ante el cuerpo del Señor hecho una llaga.

Representa el momento en el que Pilato, lavándose las manos y afirmando no hallar delito alguno en este Hombre, se lo ofreció a los sacerdotes judíos y a la muchedumbre.

Cabe destacar la mirada triste de Jesús, quien sostiene una palma entre sus brazos cruzados sobre el pecho. Delante de Él, Pilato realiza un expresivo gesto.

Procesiona desde 1951 acompañado por la Cofradía del Ecce Homo.

Autor: Tomás Marqués, escultor catalán. Año: 1902.

Peana: Vicente Vallés, escultor oscense. Año 1947.

Oración

Acaeciome que entrando un día en el oratorio vi una imagen. Era de Cristo muy llagado y tan devota, que en mirándola, toda me turbó de verle tal, porque representaba bien lo que pasó por nosotros. Fue tanto lo que sentí de lo mal que había agradecido aquellas llagas, que el corazón me parece se me partía, y arrojeme cabe Él  con grandísimo derramamiento de lágrimas, suplicándole me fortaleciese ya de una vez para no ofenderle. (Santa Teresa de Jesús).